sábado, 12 de abril de 2008

PURGATORIO

Purgatorio
MANUEL VICENT 08/08/1999

En el tablón de avisos que hay en el cielo antes se podían leer anuncios de viajes de fin de semana al infierno. A los bienaventurados que querían apuntarse a la excursión se les prometía tres días de perversión y calderas, chicas pecaminosas , noches en llamas, todo eso que no se encuentra ni siquiera en Benidorm. El infierno solo tenía sentido cuando era el verdadero sur, un lugar de fuego eterno. Desde el punto de vista teológico no había en el universo un parque de atracciones tan excitante o una discoteca que fuera más moderna. Por eso uno imagina a los bienaventurados llenando los autobuses en busca de una emoción de fin de semana después de estar hartos de la gloria celestial, un espacio aéreo donde uno se pasaba la vida oyendo tocar infinitamente el violín y comiendo mazapán al lado de un angelote gordinflón. Pero hoy el cielo y el infierno han sido descodificados. Según la última doctrina del Vaticano ya no son lugares físicos que puedan ser incluidos en las agencias de viajes sino simples estados del alma. Decir lo que ha dicho el Papa, que la tierra ya está en el cielo porque este planeta va navegando por el universo le costó a Giordano Bruno ser condenado a una hoguera de leña ,que era de fuego real, antes de ser enviado al del infierno, que al parecer solo era de atrezzo.También ha sido desarmado el purgatorio. El teólogo que en la Alta Edad Media inventó ese estadio medio entre el cielo y el infierno del que se podía salir tributando con un sufragio por las almas benditas fue un genio financiero. No ha habido nunca negocio más rentable que el purgatorio. El pecado venial es la creación del espíritu que más dinero ha dado. Aparte de que el purgatorio es de una finura filosófica considerable porque da por supuesto que existe un punto ecléctico y dinámico en medio de dos verdades absolutas y cristalizadas económicamente este impuesto de peaje en la entrada del puente celestial ha nutrido las arcas de la iglesia mucho más que la tasa de diezmos y primicias. Las almas benditas levantaban los brazos entre las llamas cuando la Virgen bajaba al purgatorio a realizar la saca los sábados por la tarde no sin haber mirado previamente el estadillo de las limosnas que los familiares hubieran hecho en su respectiva parroquia. Ahora solo queda por descodificar el limbo. Pero ese estado del espíritu hay que dejarlo como está. Es la última playa tranquila y ecológica que queda.

No hay comentarios: